Al entrenador Dave le gusta entrenar a sus jugadores con intensidad, y ahora es el turno de su mejor jugador, Korar, de tener un tiempo extra en el campo con él. Aprendiendo algunos movimientos nuevos, Dave está ansioso por hacerlo cada vez mejor, pero con un esguince en la ingle, su trabajo puede haber sido un poco intenso. Llevándolo de vuelta a los vestuarios y aliviando su tensión allí, su mano es guiada cada vez más alto, hasta que las intenciones de Korar son claras, y las pollas pronto desaparecen por las gargantas del otro. Ambos lo disfrutan y van por más. Follando a Korar, el hombre de cuerpo suave y tonificado, justo ahí en el vestuario, ¡es una suerte que esto sea extracurricular y esté vacío! La polla gruesa de Dave se introduce dentro de Korar sobre los bancos, y Korar pronto la llena con una carga pesada.